Giorgio Vasari (Arezzo, 1511 - Florencia, 1574) se cuenta, por su pluma, no por su pincel, entre los máximos exponentes del Cinquecento. «Las Vidas», publicadas en Florencia en 1550 por el editor ducal Lorenzo Torrentino, conforman una indiscutible obra maestra y fuente escrita imprescindible para quien desee un acercamiento directo al Renacimiento italiano y a sus protagonistas. Giorgio Vasari fue y quiso ser antes que nada historiador y por este motivo no se contentó con narrar los hechos acaecidos sin incluir juicios y críticas, sino que gustó también «distinguir al bueno del mediocre, al excelente del bueno, y hacer cuidadosa mención de las particularidades, estilos, rasgos y fantasías de los pintores y escultores». Se puede considerar, pues, este texto como la obra inaugural de la Historia del Arte. A esta edición anotada, que reproduce íntegramente la edición de 1550, se añade un índice de nombres y otro de lugares y obras que facilitan la localización de las obras a las que hace referencia Vasari.