La primera selección de textos esenciales de Walter Benjamin.Esta es la primera selección que se publica en España de los textos  fundamentales de Walter Benjamin, escogidos cuidadosamente a partir de los cuatro volúmenes de Iluminaciones y el de Discursos  interrumpidos. Benjamin fue uno de los críticos culturales más originales e indispensables del siglo XX.Este libro incluye, entre otras reflexiones, las que dedica a Kafka, a  quien le unía una estrecha afinidad personal, sus estudios sobre  Baudelaire, Proust y Brecht, así como su ingenioso (y emblemático) texto  «La obra del arte en la era de su reproductibilidad técnica», una  discusión esclarecedora de la traducción como modo literario y sus tesis sobre la filosofía de la historia.-------------radical:adj. Perteneciente o relativo a la raíz.«Clásicos Radicales» nace con la misión de recuperar algunos de los  libros más emblemáticos del sello que en su día formularon una idea  nueva u ofrecieron una mirada original y pertinente sobre las grandes  cuestiones universales. Ausentes de las librerías durante  demasiado  tiempo pero recordados y buscados por los lectores más despiertos, estos  textos esenciales de disciplinas como la filosofía, la ética, la  historia, la sociología, la economía, la antropología, la psicología y  la política mantienen su plena vigencia y vuelven hoy con fuerza para iluminar nuestro presente.-------------Críticas:
«Benjamin fue uno de los grandes escritores europeos de este siglo.»
Philip Toynbee, The Observer«Su método característico entrar en un tema en ángulo, avanzar paso a  paso de una recapitulación perfectamente lograda a la siguiente es tan  instantáneamente reconocible como inimitable, ya que requiere un agudo  intelecto, un aprendizaje ligeramente gastado, y un estilo de prosa que,  una vez que dejó de pensar en sí mismo como el doctor Benjamin, se convirtió en una maravilla de precisión y  concisión.»
J.M. Coetzee«Benjamin explicó la modernidad con una autoridad que ni cincuenta años de cambios imprevisibles ha debilitado.»
Frank Kermode, The New York Review of Books